¿Cuál es tu reacción al ver una placa promocional sobre algún producto que
quieres comprar? ¿Lo dejas para decidir más tarde?; ¿sacas la tarjeta de crédito
en el mismo instante y divides el pago en doce suaves cuotas?; ¿pagas en
efectivo o primero haces una comparación de precios? Son varias las opciones
para realizar ese negocio. Con la voracidad de la competencia entre las tiendas,
las formas de pago han sido facilitadas para poder atrapar la mayor cantidad de
clientes. Pero, al fin y al cabo, ¿cuál es la mejor opción para el consumidor final?
Eso es lo que trataremos de responder ahora.
Para empezar a responderlo con toda la alegría, podemos contestar a esa
pregunta con un enorme “DEPENDE”. Siendo más específico, primero
necesitamos ponderar algunas variables, como, por ejemplo:
¿Tengo todo el dinero?
Tener todo el monto te ayudará a actuar de manera más racional. Así, pasas a
tener el control en la negociación, porque la otra parte es la más interesada en
que se efectúe la transacción. Por otro lado, no contar con los recursos te dejan
en desventaja, aún más si tienes que decidirte rápido. Si eso sucede, es posible
que tengas que hacer un mal negocio para no perder la compra, siempre y
cuando la oferta sea escasa.
¿Lo necesito ya o puedo esperar?
Para el cliente lo ideal sería siempre poder esperar. ¿Cuándo has visto una
acción apresurada resultar en algo positivo? Claro que puede pasar, pero esa no
es la tendencia. El tiempo será tu aliado para poder analizar varias opciones y
elegir aquella que más se encaje en tu presupuesto y parámetros.
¿Es algo fácil o difícil de conseguir?
Este punto se refiere a una ley de la Economía: oferta vs. demanda. A más
oferta, más barato – a más demanda, más caro, y viceversa. Por consiguiente,
tienes que analizar en qué clase se encuentra lo que quieres comprar, pues es
muy posible que esto determine el precio y la forma como lo pagarás.
¿Eso me generará más gastos o me traerá dinero a futuro, o sea, es un pasivo
o un activo?
Sí estás comprando algún producto para la reventa, por ejemplo, y no tienes que
pagar intereses, no cabe duda de que lo mejor es comprarlo a cuotas, venderlo
primero y solo entonces pagarlo a tu vendedor, así no tienes que sacar nada de
tu bolsillo. Por otro lado, digamos que sea un carro. No disponer de la plata y
financiarlo en un banco es una de las maneras más fáciles de quebrarte
financieramente. Tendrás que todos los meses amortiguar las cuotas con altos
intereses, más impuestos, mantenimiento, seguro y combustible. Al final,
terminaras con un vehículo desvalorado que te costó el doble. ¡Ten cuidado!
¿Pagando en cuota única recibo algún descuento?
Si la respuesta es sí, y el descuento es grande, entonces la respuesta es rotunda:
Sí. De lo contrario, si no hay rebaja, ni tampoco intereses, entonces es mejor
comprarlo a cuotas. Sería mejor invertir la plata en algo que te devuelva
utilidades.
¿Incurren intereses al pagarlo a cuotas?
Generalmente los intereses no son bajos, entonces lo mejor es comprarlo en
cuota única. Claro que también depende de lo que se está comprando. Sí es una
máquina para tu fábrica, y la tienda te ofrece la opción de comprarla a cuotas,
con intereses razonables en comparación a un préstamo en el banco, quizás sea
un buen negocio. En todos los casos ser definitivo es riesgoso.
¿La tienda ofrece algún plan de fidelidad? ¿Y ventas casadas?
Hay que contemplar también la opción de puntos. Muchas empresas te premian
con algo por mantener una constancia de relacionamiento. En determinados
casos, aunque si pagues algún incremento, es posible que haya un buen
beneficio en otra operación. Además, no se puede rechazar tampoco los combos
– el famoso lleve tres, pague dos; o algo por el estilo.
Cómo pudiste percibir, existen varias posibilidades, quizás inclusive otras más.
Lo que tenemos que tener en mente es que la forma de pago tiene que ver con
las ventajas y desventajas; la posición de la parte (comprador o vendedor); y
sobre todo los aumentos y descuentos.
¡Considera todo esto en tus próximas compras, y seguramente harás muy buenos
negocios